PR   AB-29

   

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            Este sendero tiene, además de los invariables de la naturaleza, varios atractivos: visitamos un paraje de romántico atractivo (La Cueva de la Osera), es -en el sentido en que nosotros lo hemos concebido- de cómodo descenso en su mayoría, y -finalmente- supone un enlace de otros cinco senderos del Plan de Senderos “Verdenace”, facilitando así la realización de excursiones circulares.

 

            Se inicia el sendero en la Juanfría, zona de recreo de agradable frescor, por donde pasa el PR AB-23, que se dirige a Riópar. Desde allí, nos dirigimos en dirección este, zigzagueando por el carril. A un kilómetro, surge del carril una senda que va a ascender en medio kilómetro al Calar de la Osera, para visitar la Cueva de la Osera y regresar de nuevo al trazado de nuestro sendero. De nuevo en el carril lo seguimos para que al poco más de un kilómetro se una por nuestra izquierda el PR AB-24, que se dirige a la Cañada del Provencio, y nos va a acompañar unos doscientos metros. Pasamos por la Fuente de la Canalica, junto al carril, y llegamos a la aldea del Encebrico. En este punto también finaliza el PR AB-35, que viene del Puerto de las Crucetillas, y nos va a acompañar unos doscientos metros desde el Encebrico.

 

            Desde la era, surge una senda que desciende al río, en dirección este. En unos trescientos metros, la senda llega a un carril que seguimos a la derecha y que nos va a conducir en algo más de dos kilómetros cerca de la aldea de Perines. Desde una explanada bajo la aldea, surge de nuevo la senda que va a descender, enmarcada en un barranco -que cruza en varias ocasiones- y que, en dos kilómetros y medio nos lleva a la carretera de Alcaraz a Riópar. La cruzamos y continuamos descendiendo medio kilómetro más hasta llegar al Batán del Puerto, otro punto de interés paisajístico y gastronómico, pues es reparador hacer un alto en su afamada Pensión, a cuyos pies nace el río Madera, fruto de la unión del de Las Hoyas y del Endrinales.  Aquí se une este sendero al PR AB-25, que se dirige a la Vegallera.

 

            Desde el Batán, seguimos la carretera en dirección oeste, para abandonarla unos 300 m. después, por una senda que surge por la derecha y que va a cruzar el río de Las Hoyas. Aquí se separa nuestro camino del PR AB-25, y sigue por una ladera, con el río abajo -a la derecha- y en algo menos de un kilómetro nos lleva a las ruinas del Cortijo de Eloy. Al dejar éste, el camino se ensancha y, en 700 m., nos lleva a otro carril asfaltado, por donde discurre el PR AB-26, que también se dirige a la Vegallera.

 

            Si lo seguimos a la derecha, nos conduce en pocos metros, a Fuente Lisa, atractiva zona de recreo, junto al río. La seguimos a la izquierda, para llegar a uno de los núcleos diseminados de Río Madera (llamado por los mayores Cortijo de los Morenos). Lo cruzamos y en algo más de un kilómetro llegamos a otro de los núcleos de Río Madera (El cortijo de Baltasar), por un delicioso camino, junto al río Madera. Estamos en el Hotel Peñalta, otra recompensa añadida a la finalización de este sendero, pues saben atender y agasajar a los caminantes.